Por un rapto de lucidez, por el empuje de la familia o el consejo de los amigos. Para iniciar el camino de salida de una adicción, la ludopatía, que puede llevarse casas, ahorros y hasta fortunas familiares. Por cualquiera de esos motivos, más de 500 pergaminenses pidieron que se les impida ingresar a las salas de bingo y los casinos de la Provincia de Buenos Aires, un trámite que en muy pocos casos se complementa con un tratamiento en un centro de adicciones.
"La crisis económica es la principal causa por la que el jugador llega a la sala, de ahí a que se convierta en un jugador patológico depende de otras cuestiones". Así lo confirmó Belén Taborda, Coordinadora en nuestra ciudad de uno de los diez Centros de Prevención y Asistencia al Juego Compulsivo que dependen de la Provincia de Buenos Aires.
En diálogo con el programa "Pan y Circo" que se emite por RADIO MÁS (FM 106.7), la psicóloga aclaró que si bien "aumenta el número de autoexcluidos en época de crisis económica, eso no se traslada al aumento de pacientes que se tratan la patología" y agregó "que el paciente tome registro de que tiene un problema es una de las mayores dificultades, más en una ciudad como Pergamino que les avergüenza pensar quien puede verlos entrar acá".
La autoexclusión es un primer paso para quienes sienten que ya no pueden controlar su adicción a las apuestas y forma parte de un programa que se creó en 2005 para atender una problemática que, en rigor, siempre existió pero que en los últimos tiempos cobró cada vez más visibilidad y se profundizó en un contexto en el que también se extendió la oferta para jugar.
La autoexclusión puede ser solicitada en forma libre y voluntaria en el Centro de Prevención ubicado en Estrada 1939 (teléfono 414554). Allí se firma la solicitud y se informa acerca de los pasos a seguir y del tratamiento necesario. "Por el lapso de dos años no le permitirán el ingreso a ninguna sala de juegos de la provincia de Bs.As" sostuvo Taborda y agregó "tenemos muchísima demanda de autoexclusión semanalmente". Para completar el trámite, tiene que presentar fotos que serán enviadas a las salas para que se la incorpore al listado de personas con la entrada prohibida. Si bien el pedido es irrevocable por un período de dos años, la Coordinadora local reconoció grietas en la implementación y aseguró que "está a punto de aprobarse una Ley nacional de ludopatía, para intentar tener un registro nacional de autoexcluidos con un sistema más eficaz para poder reconocerlos".
Consultada sobre la cantidad de solicitantes en nuestra ciudad, la Coordinadora sorprendió con su respuesta: "En vigencia, tenemos alrededor de 500 autoexcluidos. El centro de Pergamino es donde más autoexclusiones se firman en toda la Provincia". Un número que preocupa si se tiene en cuenta que entre los otros nueve Centros de Prevención y Asistencia al Juego Compulsivo se encuentra por ejemplo Mar del Plata, con casi 1.000.000 de habitantes y ciudades como Bahía Blanca, Avellaneda y La Plata.
Antes de culminar la entrevista con "Pan y Circo", Taborda compartió uno de los casos de ludopatía que más la sorprendió: "Hemos tenido personas que perdieron campos, autos, familia. Incluso hubo un hombre que en su lecho de muerte pedía que lo lleven a jugar. Lo único que pedía antes de morir era que lo lleven al casino".
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