"Eran aproximadamente las dos de la mañana cuando un joven de la ciudad de Salto circulaba en un Gol Trend junto a una chica de Arrecifes a la que iba a llevar a su casa, en barrio El Lago. Transitando por calle Córdoba y Juan XXIII, un Fiat Uno de color blanco se les cruza delante impidiéndole el paso y se bajan dos sujetos armados, apuntándolos y pidiéndoles que desciendan del vehículo. El chico se asusta, pensando que querían robarle, esquiva el Uno y huye en dirección al domicilio de la chica, cuando recibe un disparo de arma de fuego en la parte trasera del Gol; pero no se detiene allí imaginando que, si lo hacía, los sujetos podían meterse en la casa".
Dobla en la esquina siguiente y se encuentra con un móvil policial, por lo que se detiene a pedir ayuda. Pero al hacerlo, los efectivos policiales lo tiran al piso y lo esposan. Allí llegan los que iban en el Fiat que los había interceptado y uno de ellos lo patea en el piso, pegándole en un brazo y en la zona costal.
"Ahí se enteran que quienes lo habían parado eran también policías, en un auto no identificado como tal y sin uniformes. Tampoco en ningún momento se identificaron como policías", continuó detallando el Dr. Félix.
"A los chicos los detuvieron por desobediencia y resistencia a la autoridad y los llevaron al Hospital Municipal, donde no cumplieron con el protocolo de revisación médica. Sólo le preguntaron si había sido golpeado y el chico dijo que no, por miedo, intimidado por el personal policial. Luego, obviamente, lo dejaron en libertad porque no había hecho nada. Es una locura que pudo terminar en una tragedia; solo por centímetros no alcanzaron a uno de los dos jóvenes con el balazo", siguió contando el abogado.
"Al auto lo requisaron y no encontraron absolutamente nada, porque no tenían nada extraño. Al contrario, la billetera que el chico tenía dentro del auto desapareció. Cuando fuimos a buscarla ya no estaba", añadió.
"Realizamos la correspondiente denuncia en Ayudantía Fiscal y se identificó al policía que efectuó el disparo y que agredió al joven sin ningún motivo. La Fiscalía ahora ordenó que se pericie el auto baleado por personal que no sea de policía. La única infracción impuesta hasta el momento es por supuestos ruidos molestos. Esperemos que se tome alguna medida para con estos dos efectivos porque es muy grave lo que sucedió. Sabemos que el oficial que cometió esos excesos hace 15 días que está trabajando en Arrecifes; él mismo lo confesó tratando luego de exculparse", cerró Félix.
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