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En pleno pico de casos, habilitaron fiesta para más de 100 personas

El evento se desarrolló en el camping del gremio UPCN. A pesar de las denuncias de los vecinos, ningún funcionario de la Municipalidad se acercó al predio para clausurarlo.

En pleno pico de casos de coronavirus y cuando los récords diarios de contagios llevaron a las autoridades a tomar decisiones drásticas, la Municipalidad de San Vicente hizo oídos sordos a los reclamos de los vecinos que denunciaron una fiesta clandestina con más de 100 personas.

El evento comenzó alrededor de las 15 horas y se llevó a cabo en el camping que el gremio UPCN posee en la localidad de Alejandro Korn. En esas instalaciones, desde afuera del predio, se podía apreciar claramente decenas de autos que estaban estacionados y cómo iban descendiendo los asistentes.

La celebración contó además con un catering especializado para los cerca de 120 invitados que no cumplieron ningún tipo de protocolo. Al notar esta situación, los llamados al 147 y al 911 no se hicieron esperar, como así también el aviso a la secretaria de Seguridad local, Mabel Rojas.

Sin embargo, ningún patrullero y mucho menos un funcionario municipal se acercó al predio para ponerle un freno a tamaña concentración de personas. Es más, ante la consulta de los vecinos, desde el Ejecutivo que conduce Nicolás Mantegazza respondían que se trata de un evento cultural, algo que estaba totalmente alejado de la realidad.

Por el contrario, las puertas del lugar estaban cerradas y el acceso a personas ajenas a la ceremonia era restringido. Incluso, según se supo después, los agentes locales que debían controlar este tipo de irregularidades afirmaron que todas las autoridades estaban al tanto del evento.

De acuerdo a lo informado por el portal El Ojo de San Vicente, cuando los participantes de la celebración, que incluyó hasta karaoke y un presentador, notaron el malestar de los vecinos, salieron del salón y comenzaron a tapar las patentes de sus autos con hojas de los árboles, para evitar que fueran fotografiadas o filmadas.

Los rumores que circularon después indicaban que se trataría de la fiesta de cumpleaños de 15 de la hija de un excandidato a intendente.

Mientras los comercios de San Vicente están obligados a cerrar sus persianas para evitar la propagación del coronavirus, Mantegazza y sus funcionarios estarían dando vía libre a dirigentes allegados para poder llevar a cabo una masiva ceremonia, donde no se cumplió ningún protocolo. 

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