Los videojuegos pueden ser una gran herramienta para distenderse, entretenerse y compartir tiempo -online- con amigos y familiares. Pero también pueden convertirse en un adicción que genere serios problemas.
Según la Asociación de Deportes Electrónicos y Electromecánicos de Argentina, el país cuenta con aproximadamente 19 millones de jugadores -alrededor del 42% del total de sus habitantes- y registró un aumento del 20% la cantidad de gamers durante la pandemia por COVID-19. De este total, un 52% juega con regularidad.
Un estudio de la plataforma Divorce Online, un servicio de divorcios en línea de Reino Unido, reveló que el Fortnite fue citado como la causa principal en más de 200 solicitudes de divorcio. Pero mientras algunos deciden separarse, otros buscan otra clase de juegos.
Gleeden, un sitio Web de encuentros extraconyugales pensado por y para mujeres, hizo una encuesta entre más de 7.000 usuarias de la aplicación de Argentina y Uruguay. El 61% de las mujeres piensa que el uso excesivo de videojuegos de su cónyuge podría haber favorecido una infidelidad.
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El estudio que vincula a los videojuegos con la infidelidad. (Foto: Gleeden).
Según los resultados de este informe, el 82% de las encuestadas afirma que su pareja juega a los videojuegos y el 29% asevera que lo hace de forma diaria. Al consultar si los videojuegos han representado algún tipo de conflicto en la pareja, el 69% afirma alguna vez haber discutido por este tema. Y de ese 69%, el 56% dice que el uso excesivo de videojuegos representa un tema de discordia regular.
La pandemia potenció la adicción a los videojuegos de chicos, adolescentes y adultos. El encierro incrementó el aburrimiento, lo que llevó a un aumento de las horas diarias dedicadas a las pantallas.
“Cabe aclarar que el uso adecuado de los videojuegos es muy efectivo para desarrollar una estimulación funcional y habilidades cognitivas básicas para el aprendizaje como la atención, la percepción, la memoria y las funciones ejecutivas. Sin embargo, utilizados en exceso, pueden producir cierta adicción, estrés, comportamientos antisociales, vista cansada, problemas de oído, lesiones varias y dolores de espalda”, detalló Mariela Caputo, psicopedagoga, máster en Neuropsicología Clínica e investigadora de Doctorado en la Facultad de Medicina de la UBA.
La especialista señaló que la Organización Mundial de la Salud (OMS) agregó un tipo de dificultad específica al que llamó el “desorden por videojuegos” dentro de los problemas mentales, debido a estos nuevos síntomas.
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