La situación es preocupante y -al mismo tiempo- paradójica. La «Casita de Don Orione», un refugio para personas en situación de calle, tiene su capacidad de albergue prácticamente a tope durante todo el año. “Se da una cosa muy curiosa. En verano hemos recibido más gente que en noches de invierno”, cuenta el Padre Matías, referente del hogar que recibe a personas que no tienen un lugar donde pernoctar.
La Casita tiene cama para 23 personas, una capacidad que estuvo a tope durante febrero y marzo último, cuando las altas temperaturas reinaban en la ciudad. En la noche del jueves último, la más fría en lo que va del año, fueron 21 las personas que se se acercaron al inmueble ubicado en Lamadrid 26, en la vecina localidad de San Nicolás, buscando refugio.
“Creo yo que por intervención divina, gracias a Dios nunca hemos tenido que dejar a gente en la puerta por falta de camas. Siempre hemos trabajado con la capacidad completa pero nunca nos hemos visto sobrepasados por la demanda”, cuenta el Padre Matías.
Desde que abrió sus puertas en diciembre de 2016, la «Casita de Don Orione» recibió 486 personas diferentes. “La mitad de ellos han sido huéspedes que regresaban alternadamente, mientras que el resto es gente que se encuentra de paso por la ciudad y viene en busca de refugio por unas noches”, agregó el cura párroco de la Iglesia María Madre.
Buena parte de los huéspedes que alternan son personas con algún problema de adicción que, al mejorar su situación, vuelven a ser recibidos por sus familiares. Otros consiguen trabajo y deciden alquilar una pieza de pensión.
“Con la llegada del frío vamos a proponerle a la Policía la posibilidad de que la gente denuncie al 911 a aquellas personas que pasan la noche en la calle. Ese sistema ha funcionado bien. Lo que vemos es que la ciudadanía utiliza esta vía de denuncia más en invierno que en verano, como que hay mayor sensibilidad cuando las temperaturas son más bajas”, cuenta el Padre Matiás. En estos casos, la Policía toma el aviso de que hay una persona en situación de calle, acude al lugar y lo traslada hasta la «Casita de Don Orione» si no se encuentra bajo los efectos del alcohol o drogas ni se muestra violento. “Afortunadamente en los últimos tiempos no hemos tenido que padecer situaciones violentas, más allá de algunas rencillas que no pasaron a mayores”, asegura el párroco. Vale señalar que aquellas personas que alguna vez protagonizaron algún tipo de incidente tienen prohibido el ingreso al hogar refugio.
En campaña
La «Casita de Don Orione» no recibe subsidio alguno, sino que se financia a partir de las actividades que promueve la Iglesia María Madre. Donaciones, bonos solidarios, campañas y algunos eventos particulares permiten reunir los alimentos que se cocinan para los huéspedes.
De hecho, el Hogar ahora ha lanzado una campaña solidaria para reunir los fondos que permitan construir un depósito donde guardar ropa, alimentos y otro tipo de cosas. Asimismo, el 1º de julio se llevará a cabo una jornada de entretenimientos con el objeto de reunir dinero para tal fin. “La gente colabora mucho con nosotros. Estamos infinitamente agradecidos”, completó el Padre Matías.
La «Casita de Don Orione» es un hogar de noche, abierto todos los días de 20:00 a 8:00, para dar cobijo, aseo, cena, descanso y desayuno, a quienes de forma crónica u ocasionalmente, se encuentran sin techo y en situación de calle. Quienes deseen colaborar para satisfacer las necesidades que tiene el hogar se pueden contactar al 336 4499914.
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