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Quema en las islas: Cabandié no hizo nada para prevenir los incendios

Debido a los grandes incendios ocurridos el año pasado en las islas del Delta, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible realizó una contratación directa para la urgente construcción de cinco faros de conservación. Sin embargo, hace algunas semanas San Nicolás y la región volvieron a estar castigados por los incendios y los faros aún no están terminados, a pesar de que ya pasaron casi doce meses desde el anuncio.

Las quemas ilegales de las islas del Delta azotaron con un humo incesante las calles de la ciudad y de la región, comprometiendo la salud de los nicoleños. Luego de la experiencia del 2020, se esperaba un accionar competente por parte de las autoridades nacionales;  sin embargo las respuestas siguen sin ser eficientes ante estas situaciones.  

El 20 de noviembre del año pasado, una vez extinguidos los incendios, el titular del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié, arribó a Villa Constitución, más precisamente, a la Reserva Ecológica Isla del Sol, con el fin de hacer entrega de equipamientos para afrontar posibles incendios futuros y anunciar la construcción de faros de conservación para alerta temprana y evitar la propagación de las quemas.

En esa oportunidad, Cabandié sostuvo que “para esta jornada estamos presentando drones, para los que se capacitaron en su manejo distintos guardaparques. Al mismo tiempo, equipamiento meteorológico; y en los próximos días vamos a hacer entrega de cámaras trampa”. Por otro lado, aclaró que la estrategia desplegada es “de cercanía”, al referirse a la presencia constante de la Administración de Parques Nacionales en el territorio. Asimismo, afirmó que la proyección para la zona del Delta del Paraná es la de tener “20 faros y de esa manera poder alcanzar una cobertura amplia”, que fortalezca la alerta temprana de incendios y las acciones de vinculación con los isleños.

Desde la página web del Ministerio, dicen que los faros de conservación son núcleos interconectados que constituyen un modelo de gestión para la prevención de riesgos ambientales, la conservación de la biodiversidad y la transición productiva regional hacia la sostenibilidad ambiental, económica y social.

EL NORTE realizó una investigación para conocer los motivos por los cuales aún no hay novedades del sistema de prevención que podría haber evitado un daño más al medioambiente y a la salud. Desde el Ministerio le adjudicaron la culpa a la pandemia y los plazos de contratación pero éste medio, a través del Compr.Ar pudo verificar que el proceso fue de carácter “urgente” y que desde el 8 de abril hay una empresa encargada de realizar la construcción de las famosas torres.

Los faros

El director nacional de Planificación y Ordenamiento Ambiental del Territorio del Ministerio de Ambiente, Abelardo Llosa, declaró en los micrófonos de «Primicia Nicoleña» (Radio U FM 89.9) que “ya que no hubo ninguna política pública en el último Gobierno, es que surgen los faros de conservación como una estrategia que tiene varias patas. La misma surgió el año pasado cuando se desató el primer gran incendio en el Delta -que es algo que no se veía desde 2008-, una pronunciada bajante del río, condiciones muy fuertes para la propagación de incendios y nos vimos en la necesidad de hacer algo para evitarlos”.

“En ese contexto pasaron varias cosas, primero que el Servicio Nacional de Manejo de Fuego pasó a depender del Ministerio de Ambiente que permite mejorar el apoyo a las provincias al combate del fuego. Pero además, conjuntamente entre las provincias de Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe, dentro de lo que es el PIECAS (Plan Integral Estratégico para la Conservación y Aprovechamiento Sostenible en el Delta del Paraná), nos propusimos diagramar un esquema de prevención porque, si bien el fuego se combate cuando se inicia, hay que intentar prevenirlo”, añadió Llosa.

En relación a eso, es que nacen los faros de conservación. “Tiene varias patas, una de ellas es un sistema de alerta temprana de detección de incendios, para poder ir más rápidos a apagarlos y evitar que se propaguen. Este sistema, se constituye en cinco torres, de 40 metros de altura, que en la punta tienen cámaras llamadas multiespectrales, que detectan calor, humo y también tienen video para detectar el fuego por ese medio. Cuando esos tres sistemas se cruzan y dan todos positivos, se emite un alerta de fuego al centro de comando que va a estar en el Parque Nacional Siervo de los Pantanos y otro en el Ministerio de Ambiente y con esto tendríamos resultados en segundos”, explicó Llosa.

Las torres se localizarán en el Parque Nacional Predelta (Entre Ríos), el Camping Municipal de Puerto Gaboto (Santa Fé), la cabecera del Puente Rosario – Victoria (ER), la Reserva Municipal Isla del Sol en Villa Constitución (SF) y el Camping Municipal de Victoria (ER). Sin embargo, aún no están instaladas pero -según Llosa- “ya las vamos a estar instalando la semana que viene y el sistema completo va a estar antes de diciembre terminado”.

Desde distintas ONGs y en publicaciones de redes sociales, se hicieron virales las imágenes de donde deberían estar las torres. Se trata de un predio alambrado que protege la estructura metálica que hará, finalmente, que funcione el sistema de prevención. Pero pasó casi un año desde el lanzamiento de dicho proyecto y no pudieron evitar, otra vez, la aparición de 7.252 nuevos focos de incendio, que arrasaron 50 mil hectáreas, según el Observatorio Ambiental de la Universidad Nacional de Rosario (fue la cantidad que se supo que se prendió fuego en este 2021).

Vale destacar que, a pesar de contar con todos los recursos y gran parte del equipamiento que el propio ministro Cabandié entregó en la Reserva Ecológica Isla del Sol, “nada funciona sin las torres. No tiene sentido pilotear los drones si no tenés algo que te esté alertando dónde hay focos de incendios”, contó la secretaria de Ordenamiento Territorial del Municipio de Villa Constitución, Paola Bagnera.

“Es una lástima que los títulos de los diarios hayan sido que los incendios los apagó la lluvia, cuando hay mucha gente atrás trabajando en conjunto desde hace más de un año para poder paliar esta problemática. Si bien aún no están las torres, sé que en el corto plazo vamos a poder contar con el proyecto de prevención”, aseveró Bagnera. 

Contratación directa

EL NORTE accedió a la licitación que el Ministerio de Ambiente lanzó el 18 de febrero del corriente y adjudicó a la empresa “Tecnologías de Información S.A” el 8 de abril pasado por una suma de $111.900.000 de pesos. La elección se hizo ya que “su oferta es admisible, económicamente conveniente y cumple técnicamente con lo solicitado en los Pliegos de Bases y Condiciones Particulares y Pliego de Especificaciones Técnicas”, afirmaron desde el Ministerio. En los documentos administrativos que dan cuenta del proceso de contratación, se pudo constatar que hubo ocho postulantes pero solo tres oferentes, siendo la ganadora dicha empresa que es la encargada de llevar adelante la obra.

También, el pliego establece que hay un monto de $39.165.000 para ampliación en caso de necesitarse. Esto implica un 35% más del valor consignado anteriormente. Por lo general, se suele habilitar la ampliación presupuestaria en caso de que se necesiten más materiales, mano de obra, u otro producto o servicio para el trabajo.

En el documento contractual, figuran los valores de cada gasto que generaron los distintos equipos y trabajos por parte de la empresa adjudicataria. Las torres iban a ser, en principio, cuatro pero terminaron sumando una quinta. Cada una costó al Estado $8.375.000; dos sistemas contraincendios, mencionados anteriormente por Llosa, que costaron $1.900.000 cada uno; cuatro alarmas con detector infrarrojo, llamador telefónico y detector de humo por $9.750.000 cada uno; un curso de capacitación de brigadistas y manejo de drones que costó $6.800.000; y finalmente, 24 servicios de soporte técnico por un total de $28.800.000 ($1.200.000 cada uno).

Lo curioso de esto es que en el llamado que hace a la contratación directa el Ministerio, asegura que “mediante la RESOL-2021-32-APN#MAD el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible autorizó el llamado a Contratación Directa por Urgencia”. La urgencia aún persiste y recién en diciembre –según estimó Llosa– estaría todo listo: es decir, 13 meses después.

El argumento de Llosa para la demora en la construcción e instalación de los faros fue que “son los tiempos del Estado en los procesos licitatorios (en este caso fue una contratación directa). Igualmente se hizo todo muy rápido a los que estamos acostumbrados por parte de los organismos estatales. Se trata de algo muy complejo, se tuvieron que hacer estudios de suelos para la instalación de las torres, la empresa tenía que comprar los materiales, las cámaras, las barras de acero; todo eso ya pasó y ahora estamos en el proceso de construcción. Lo importante acá es que ahora hay presencia del Estado y yo entiendo que la gente quiera todo ya, pero estamos dentro de los tiempos razonables”, aseveró Llosa.  

“Nosotros, dentro del proyecto de prevención, capacitamos a más de 80 brigadistas en Entre Ríos, otros de Santa Fe, trabajamos en la articulación de las tres provincias involucradas (Buenos Aires, Santa Fe, Entre Ríos); es decir estamos llevando adelante una tarea grande para poder prevenir los incendios”, agregó Llosa.

Sobre las posibilidades que manejan desde el Ministerio para poder prevenir futuros incendios y combatirlos, apuestan fuertemente “a que el Congreso sancione la Ley de Humedales que lamentablemente tiene muchos intereses de por medio. Nosotros únicamente podemos apostar al sistema de prevención y a que el Poder Judicial pueda ayudar a encontrar a los culpables de esta atrocidad”, manifestó Llosa.

Versiones contrapuestas

En una entrevista que el Secretario de Control y Monitoreo Ambiental de la Nación Argentina, Sergio Federovisky, tuvo con la Radio Sí FM 98.9 de Rosario, aseveró que “estamos trabajando para instalar las torres a mediados de junio de 2021”. Ahora, Abelardo Llosa afirma que la idea es poder tener los faros de conservación listos antes de diciembre.

Otro de los factores que le atribuyen a la tardanza de la obra, es la pandemia. “Los procesos administrativos siempre fueron lentos y con la crisis sanitaria se agravó muchísimo. Nosotros acá en Villa Constitución tuvimos muchos retrasos, así que imagino que habrá pasado algo similar en Nación”, expresó Paola Bagnera.

La empresa

Como consignó EL NORTE, la empresa que fue adjudicada para realizar la obra es «Tecnologías de Información S.A». Al cierre de esta edición no hubo respuestas por parte de la empresa sobre por qué aún no tienen las cinco torres terminadas. No respondieron consultas telefónicas, tampoco vía mail. Las respuestas tampoco llegaron de parte de la empleada administrativa con la que se pudo contactar este diario. De hecho, dicha persona perteneciente a la empresa, es la que figura entre los datos de contacto de la misma en el documento contractual.

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