Sin dudas, el gran revés de Tinder fue el contexto de la cuarentena en distintos lugares del mundo. El tiempo de conexión a internet aumentó considerablemente a causa de la nueva situación que trajo el Coronavirus y así, junto a las restricciones para los encuentros entre las personas, las redes pasaron a ser un espacio más habitado que nunca, cada uno desde su casa.
La app de citas creció un 8% en agosto 2020 en comparación con el mismo período del año anterior, un aumento importante si se considera que ya en el primer trimestre del año superó los 6 millones de suscriptores, sumando un millón de suscriptores nuevos.
Ésta última cifra surge de un reporte de informe sobre sus resultados financieros que habían ascendido hasta ese trimestre a 545 millones de dólares, lo que significaba un 17% más que el período anterior.
Italia, España, Alemania y Reino Unido fueron los países que más aumentaron la duración de las conversaciones con un incremento del 30%.
La aplicación de citas también registró un récord si se suman las cifras de todo el mundo: obtuvo el increíble número de más de 3 mil millones de swipes.
Esa definición denota la acción de “deslizar“, característica que hizo a la app tan popular para indicar que alguien te gusta o no. Hay que deslizar a la derecha (por sí) o a la izquierda (por no).
Por otra parte, la función de video llamada lanzada por la compañía ya es un boom entre los usuarios que pueden acceder a largas conversaciones mirándose a la cara sin contacto alguno, antes de “quedar“ para el encuentro en una cita real.
Con bares y restaurantes cerrados, resulta ideal una manera de “tantear“ o vivir algo parecido a un encuentro previo, coquetear y recuperar algo del contacto que inicia un romance.
Las suscripciones Gold y Tinder Passport también crecen considerablemente. Esta última permite conectar con personas de otras partes del globo.
El liderazgo de la app recibe un impulso a su inmejorable posición que ya iba bien. Según App Annie las aplicaciones de citas de este tipo desbloquearon “las claves para la monetización a través de suscripciones“.
De esta forma, sus ingresos anuales combinados crecieron en un 920% entre 2014 y 2019, unos 2200 millones de dólares.
Para este año, se prevén aumentos en las tendencias actuales, con acento en las aplicaciones basadas en videos y servicios con suscripción “que ganan en importancia, ubicuidad e ingresos“.
De esta manera, y en medio de la pandemia, las cifras para Tinder prometen ser mucho más que alentadoras.
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