Como ocurrió en recientes oportunidades con efectivos policiales, bomberos voluntarios y también vecinos comprometidos, una nueva intervención de un oficial de policía evitó un intento de suicidio.
El hecho aconteció en la zona del denominado Puente de Fierro, a orillas del río Arrecifes, cuando un pescador observó que un hombre joven estaba intentando colgarse de un árbol y de inmediato dio aviso a la Policía.
Un móvil del destacamento de Barrio La Cumbre llegó al lugar con extrema rapidez y el efectivo Lucas Murúa se dirigió hacia la víctima, quien afortunadamente no había logrado aún concretar la tan drástica determinación.
Hablando mucho con el joven logró disuadirlo y lo llevó hasta el móvil, mientras otra unidad llegaba en apoyo porque también fue necesario rescatar el patrullero que conducía Murúa, debido a que en la urgencia quedó atascado en el barro y con riesgo de caerse al río.
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