Laura Escandé, que concurre al Galpón del Arte rescató la función social del espacio y la apertura que tiene para toda la comunidad, a través de los talleres de teatro, literatura, manualidades y artes plásticas.
Es docente jubilada y llegó al espacio del Barrio Kennedy durante la pandemía. “Estoy asistiendo al Galpón del Arte desde que llegué a Pergamino. Va a hacer 3 años que estoy viviendo acá y en la ciudad fue lo primero que abrió sus puertas durante la pandemia, en octubre de 2020” dijo a La Ventana de RADIO MÁS (FM 106.7). “Llegué a Pergamino saliendo de una situación de violencia de género y fui recibida por amigos. Estuve viviendo unos días con ellos y después alquilé mi departamento. Estaba necesitando encontrarme con seres humanos porque todos mis contactos eran a través de pantallas como lo fue durante la pandemía”, precisó Escandé.
Con respecto a la cantidad de personas que concurren, explicó que en el horario en el que asiste al taller de cerámica de los 3 que se brindan durante el día, son 20 personas e incluso a veces no quedan cupos. También participan adolescentes que son integrados y deben realizar terapia ocupacional.
Además, concurren alumnas de la Escuela de Artes Visuales a realizar sus prácticas docentes, como así también estudiantes de la carrera de Trabajo Social del Instituto Superior de Formación Docente N° 5. A su vez, al taller de tejido macramé concurren entre 10 y 15 personas más.
Laura Escandé compartió una valiosa anécdota que da cuenta del impacto que el Galpón del Arte tiene en el Barrio Kennedy, donde se puede disfrutar de propuestas culturales gratuitas y transitar el espacio en toda su magnitud.
“El año pasado hubo una obra de teatro gratuita, con Pamela Lombari y había chicos con familias del barrio y una señora, al lado mío, me decía ‘qué lindo’ porque no iba seguido al espacio, pero se le había ocurrido ir a ver teatro y estaba emocionada y me decía ‘cómo lo tienen, cómo lo cuidan’ y me contaba que allí habían celebrado el cumpleaños de 15 de la sobrina y el casamiento de otra persona”, afirmó.
“Ese lugar pulsa con la gente que lo construyó; está abierto. Hay chicas que van con sus hijos y chicos que abren la puerta en el medio del taller a ver si se pueden quedar sino ¿dónde van esos chicos?”, reflexionó.
En cuanto a la función social que tiene el lugar, reconoció que “es hacer real el entramado humano que nos construye como comunidad. Todo es gratuito, sin ruido”.
NOTA RELACIONADA: http://www.primeraplana.com.ar/el-ninguneo-del-intendente-a-un-importante-espacio-cultural/
En relación al apoyo que el Galpón del Arte requiere cada año para funcionar y financiarse y a la negativa del Ejecutivo Municipal de entregar un subsidio, Escandé subrayó que la ayuda económica del Estado “el año pasado no llegaba, no llegaba y no llegaba. Y no teníamos material para el taller. Así que organizamos una rifa para ver si podíamos comprar el material porque el único ingreso de subsistencia es el subsidio que le corresponde por ser punto de cultura y parece que (Javier) Martínez está siendo reticente a entregarlo”.
Por otro lado, añadió que los representantes de la comisión de Cultura del Concejo Deliberante que asistieron a supervisar la actividad que se lleva a cabo en la institución “se fueron con una idea clara, pero cada uno en su interior tenía su decisión política sobre el asunto porque pareciera que desconocen un lugar que hace 20 años hace cultura en la ciudad”. Y sentenció que “la cultura es para todos; todos tenemos derecho a disfrutar de una obra de teatro, de un libro. Hay un espacio donde estamos contenidos y el ‘Galpón del Arte’ es un espacio de reparo humano”.
Si todavía no recibís las noticias de PRIMERA PLANA en tu celular, hacé click en el siguiente enlace https://bit.ly/3ndYMzJ y pasarás a formar parte de nuestra base de datos para estar informado con todo lo que pasa en la ciudad y la región.