La iniciativa del Gobierno Nacional de permitir el autodespacho de combustible en las estaciones de servicio ha generado incertidumbre entre los playeros que temen por su fuente de empleo.
"Nos quitan el sustento"
Carlos, playero en una estación de servicio en el centro de Pergamino, expresó su preocupación: “Trabajo acá desde hace casi diez años. Este empleo es mi única fuente de ingresos y me ayuda a mantener a mi familia. Con el autodespacho, no sé qué va a pasar. Dicen que es modernización, pero para nosotros significa quedar en la calle”. Carlos también destacó la importancia del trato humano: “Esto no es solo echar nafta, es brindar un servicio”.
"La tecnología puede ser un problema"
Del lado de los clientes, también hay reparos. Sandra López, docente y usuaria habitual de una estación de servicio local, señaló que el autodespacho podría no adaptarse a todos: “No todos estamos acostumbrados a manejar máquinas para cargar combustible. Además, no me imagino a alguien mayor intentando entender cómo funcionan estos sistemas. Creo que los playeros son indispensables y la atención personalizada no debería desaparecer”.
Un debate abierto
La medida, que comenzará con la petrolera estatal YPF, promete incluir puntos de carga para vehículos eléctricos, pero los sindicatos ya se han manifestado en contra. “Esto es un ajuste más disfrazado de modernización”, dijeron desde la Federación de Trabajadores de Estaciones de Servicio.
En Pergamino, como en muchas otras localidades, el impacto de esta decisión podría ser profundo. La comunidad espera respuestas concretas que contemplen tanto la evolución tecnológica como la protección de los trabajadores que, hasta ahora, han sido el motor del sector.
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