El concejal Ramiro Llan de Rosos expresó su profunda indignación y enojo ante la situación alarmante de las calles recientemente pavimentadas de la ciudad.
Llan de Rosos no escatimó palabras para manifestar su frustración, cuestionando: “¿Hasta cuándo vamos a permitir esto? Una obra de pavimentación debería durar años; no apenas unos meses”.
El concejal denunció que, tras las inauguraciones, el asfalto muestra signos de deterioro, como hundimientos y desintegración, muy poco tiempo después de haber sido colocado. “Estas obras no son gratis”, enfatizó, recordando que son costeadas con el esfuerzo de todos los ciudadanos y nuestros impuestos.
“Con cada contribución, se financian trabajos que deberían ser de calidad”, agregó.
Llan de Rosos hizo un llamado a las autoridades responsables, exigiendo “responsabilidad, calidad y control en cada obra pública” y destacó que “la plata no sobra” y que el respeto por la ciudadanía se debe demostrar en los hechos, enfatizando la necesidad de que las obras cumplan con su propósito de brindar seguridad y confort a los vecinos.
La preocupación del edil se suma a un creciente clamor por parte de la comunidad, que demanda una gestión más rigurosa en la supervisión de las obras públicas y la utilización eficiente de los recursos.
La situación actual de las calles pavimentadas pone de relieve la importancia de establecer estándares de calidad en las obras que se realizan en la ciudad, asegurando que no solo sean inauguradas, sino que también perduren en el tiempo.
Llan de Rosos concluyó su declaración con un llamado a la acción: “Es momento de que nos comprometamos a exigir lo que merecemos: infraestructuras duraderas y de calidad que realmente respondan a las necesidades de nuestra comunidad”.
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