Que la delincuencia emerge cuando la crisis económica generalizada está en constante crecimiento no es ninguna novedad. Sin embargo, en medio del contexto económico y social suceden situaciones que rozan lo ficticio. En este sentido, durante la noche del último martes y mientras se llevaba a cabo un encuentro religioso, un ladrón robó la computadora personal del sacerdote de la iglesia Inmaculada Madre de Dios, ubicada en 502 entre 15 y 16 de Gonnet.
En cuanto al aumento de la inseguridad, confesó: "Siempre uno escucha y ve que pasan estas cosas, son cada vez más frecuentes. Entiendo que la policía no da a basto".
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