Esta semana se conoció la noticia de que una joven de 27 años, que cursa un embarazo de 5 meses, fue asaltada en Av. Álvarez y Fontella, apenas pasada la medianoche, a escasos metros de su casa. COSA CIERTA habló con Karen, víctima de una golpiza que recibió por parte de las delincuentes que se apoderaron de pertenencias sin valor económico debido a que la chica se resistió.
La víctima narró lo que ocurrió “el domingo por la madrugada, acá a metros de mi casa, cuando regresaba de visitar a gente amiga, estaba cruzando Álvarez y antes de que termine de cruzar había dos chicas. Una me agarró el pelo y con ese tirón, me tiró al piso”. De inmediato agregó: “me levanté enseguida, me empezaron a pegar en la cabeza, piñas; después me volvieron a tirar y ahí fue cuando me dieron una patada al costado de la panza y me puse en posición fetal, y me dieron una patada en la cabeza”.
Si bien a Karen no llegaron a robarle el bolso en el que llevaba sus pertenencias, las asaltantes no midieron el riesgo de este acto, ya que la chica tuvo que realizase varios controles médicos durante toda la semana para asegurarse de que el curso de su embarazo fuera el normal.
“Me hicieron un ultrasonido, está todo bien. Tengo turno para una ecografía, para ver cómo está todo. Yo no puedo tomar ninguna medicación por el embarazo, más que ponerme un poco de hielo”… tras contar cuál es su estado médico, la chica expuso la carencia de servicios públicos que hay en la zona, tanto en barrio Martínez Fraga como en Lares y, obviamente, por avenida Álvarez, entre Reynoso y Dámaso Valdez, tramo especialmente transitado cuando se realiza algún evento en el Estadio o en el Autódromo de San Nicolás.
“Acá no hay cámaras, ni siquiera hay luz. La vez que pusieron luz, se robaron los focos, los cables y hasta los postes. La instalación no duró ni siquiera una semana”, detalló la entrevistada, exponiendo el grado de inseguridad en el que viven los vecinos.
“Para tomarte un colectivo tenés que hacer varias cuadras, irte hasta Moreno y Valdez, o bien entrar a Fraga, cruzar por arriba de la vía o por el puente, que sería la entrada de Fraga”. A esa falta de servicios, se le suma que la policía “no anda mucho. O por lo menos yo no los veo”. En cuanto a remises, entran solo de día y si es que no llueve ya que las calles son intransitables hasta para los camiones.
El caso mencionado no es más que un reflejo de la realidad en materia de seguridad que se vive en la zona y cómo se conjugan la falta de servicios públicos y de patrullajes policiales para que los vecinos tengan que atravesar este tipo de situaciones.
A escasas cuadras de B° Martínez, en Av. Moreno casi Av. Dámaso Valdez, el sereno de una empresa fue blanco de delincuentes armados que ingresaron y lo maniataron para robar.
La víctima de 44 años estaba cumpliendo con sus tareas cuando escuchó ruidos que provenían de al lado de un contenedor. Inmediatamente, antes de que pudiera reaccionar, fue sorprendido por dos masculinos que, blandiendo armas blancas, lo redujeron y maniataron.
Con el trabajador ya inmovilizado, los malvivientes le sustrajeron una alianza de plata y oro, la mochila en la que guardaba el teléfono celular, $ 8.000 y otros artículos personales.
Por otra parte, los malhechores se apoderaron de una bicicleta y de un martillo rotopercutor.
Una vez que los sujetos huyeron de la escena, el hombre logró librarse de las ataduras y pidió ayuda. La denuncia fue radicada, al igual que la de la joven embarazada, en sede de la Comisaría Tercera y está interviniendo la Fiscalía N.º 13 bajo la caratula de “robo calificado”.
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