En medio de la interna con el Gobierno por el futuro electoral, el PRO prepara un encuentro para el próximo lunes en la sede del partido, con Mauricio Macri a la cabeza, con el objetivo de hacer una foto que muestre el músculo del partido amarillo.
Fuentes del espacio confirmaron a este medio que las invitaciones fueron extensivas a todos los integrantes del partido, desde intendentes hasta diputados a nivel nacional y provincial. El mismo se realizará en el edificio ubicado en Balcarce 412, la sede del partido.
El punto central será qué hacer de cara a las próximas elecciones legislativas. Si bien hay una insistencia de Macri con querer presentarse con una lista propia, lo cierto es que muchos militantes de su espacio, tanto legisladores como intendentes y gobernadores, plantean una tregua con La Libertad Avanza.
El PRO sigue sin encontrar un liderazgo firme, en especial en la provincia de Buenos Aires. Aunque Cristian Ritondo continúa como presidente del partido y sea reconocido como tal, no está claro que sea un candidato natural para competir. “No hay un liderazgo claro en la provincia, por eso es inevitable el acuerdo”, aseguran fuentes amarillas.
En el cónclave también estará presente el diputado Diego Santilli, quien en los últimos días se mostró junto al intendente de Mar del Plata, Guillermo Montenegro y pidió que haya unidad. "Si vamos juntos este año, en 2027 ganamos PBA", manifestaron.
Algunos referentes como el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, todavía se resisten a una fusión con el oficialismo libertario. Esto se da por un tema fundamental y es la resistencia del macrismo a compartir el poder de CABA con el Gobierno, ya que el oficialismo plantea un acuerdo a nivel nacional y no por distritos.
Desde el PRO creen que el gobierno está cómodo con la actual fragmentación de la oposición y es por eso que todavía no hubo llamados para formalizar una reunión. "Enfrente no se arma nada", reconocen en privado, haciendo referencia a la interna del peronismo y su falta de liderazgos.
La falta de una estructura opositora consolidada les da margen de maniobra a los libertarios, que consideran que pueden prescindir del PRO en la estrategia nacional. Sin embargo, algunos dirigentes mantienen el optimismo y creen que, pese a todo, en Buenos Aires habrá una tregua para evitar que el peronismo capitalice la falta de unidad.
La reunión del lunes será una señal de hacia dónde se encamina el PRO en su disputa interna. Mientras tanto, el partido sigue atrapado entre los intereses de Macri, las diferencias con Milei y la necesidad de ordenarse antes de quedar relegado en el escenario político.
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