El Día del Padre suele ser un día festivo para que los hijos disfruten con su progenitor o con quién haya cumplido la función de papá. Incluso también puede ser un fecha de conmemoración o reflexión para aquellos que por distintas circunstancias ya no tienen a sus padres vivos.
Sin embargo, para una familia, será a partir del domingo pasado una fecha con un recuerdo traumático. Porque en horas de la tarde, alrededor de las 15:00 hs., un padre y sus dos hijos fueron víctimas de un robo en la florería ubicada en Castelli y 3 de Noviembre.
Dos jóvenes de 22 y 19 años se encontraban atendiendo normalmente el local, mientras su padre, dueño del negocio, hacía otras diligencias en la parte superior de la vivienda. De pronto, un delincuente, con capucha colocada y un arma de fuego en una de sus manos, color gris, ingresó al negocio y luego de amenazarlos les sustrajo los celulares, marca Motorola, sus billeteras y escapó a pié hacía calle 3 de Noviembre.
“Yo estaba en mi casa cuando escuché ruidos raros en el negocio. Estaban mis dos hijos atendiendo en ese momento. El ladrón quiso encerrarlos y al no encontrar la llave, justo cuando paró un auto en la puerta, se asustó y se fue corriendo. Yo bajé y a los 2 segundos no estaba más” dijo el progenitor, con mucha impotencia.
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