Estado de ánimo: las 7 claves para hacer vibrar la vitalidad en una semana

En la vida pasamos por diferentes etapas diariamente y en momentos de pesimismo, tristeza o falta de motivación, llevar a cabo acciones que potencien la energía es una manera eficaz de mejorar nuestro estado de ánimo.

“La buena noticia es que existe una estrategia eficaz no solo para que vibre nuestra vitalidad, sino también para centrarnos emocionalmente. Se trata de siete acciones sencillas y al alcance de cualquier persona, cuya única condición es que hay que llevarla a cabo en una semana”, señaló Edith Sánchez, licenciada en Periodismo y Ciencias Sociales e investigadora del Centro Nacional de Memoria Histórica de Colombia.

Sánchez indicó además: “Es probable que al comienzo tengamos cierta reticencia a regalarnos esa semana de empoderamiento. Sin embargo, si lo pensamos un poco, no perdemos nada intentándolo y, en cambio, podemos ganar mucho. Aprender a tratarse bien, tal y como lo haríamos con nuestro mejor amigo, es fundamental para ganar vitalidad”.

“Son acciones sencillas, pero muy reveladoras. Es probable que al término de la semana de prueba sintamos que nos conocemos mejor y que entendemos más cómo son nuestras emociones. También es casi seguro que nos sentiremos mejor y lograremos que vibre nuestra vitalidad”, manifestó.

Las 7 claves

1. Dejar de criticarse: autoevaluarse está muy bien porque permite crecer, pero otra cosa es criticarse y, en especial, si lo hacemos con frecuencia. “¿Qué tal si nos proponemos dejar de hacernos críticas, tan solo por una semana? No es tan difícil y, si lo es, quizás estemos encontrando una clave para entender el porqué de nuestro malestar. Fustigarnos es una narrativa mental que poco nos aporta y, en cambio, impide que vibre nuestra vitalidad”, dijo Sánchez.
2. Perdonarse: dejar de lado la idea de que la autoexigencia implacable es una vía de crecimiento o, al menos, tratar de verlo de otra manera por una semana. “¿Qué pasaría si nos damos permiso para dejar de pensar en los errores cometidos o los logros no alcanzados y, en lugar de eso, nos concentramos en lo mucho que valemos?”, indicó. Es posible que estemos pasando por alto nuestras virtudes y aciertos, con mucha facilidad, por eso tal vez sea hora de detenerse a pensar y celebrar todo eso que hicimos y seguimos haciendo bien. Por una semana, podemos convertirnos en nuestro mejor amigo, ser comprensivo y amable con nosotros mismos.
3. Identificar lo mejor de cada situación: muchas veces el estado de ánimo decae porque solo se consigue ver el lado problemático o antipático de cada situación. Si bien es cierto que la realidad puede tener algunas complejidades que cuesta asimilar, todo tiene algo positivo. ”La tarea es cambiar ‘el chip’ mental y adoptar una nueva perspectiva, al menos por siete días. Explorar e indagar por ese elemento positivo que hay en cada una de las situaciones que hoy vemos como desagradables. Esto, por sí solo, hará que vibre nuestra vitalidad”, expresó Sánchez.
4. Desafiarse: nada mejor para salir de esos estados de pasividad y hastío que proponernos un desafío. Mejor si son más, pero con uno basta para que vibre nuestra vitalidad y nos sintamos mucho mejor. “No tenemos que subir al Everest, ni detener el tráfico con un acto callejero de malabarismo. Nos podríamos sorprender al ver que solo con enfrentar pequeños desafíos se abre una nueva perspectiva. Una buena pista para definir un propio reto está en los miedos. ¿A qué le tememos? Bueno, ahí está la respuesta. Encontrar una manera de enfrentar, en alguna medida, alguno de esos miedos”, manifestó la especialista.
5. Agradecer: la vida es mucho más sencilla cuando sabemos agradecer. “¿Qué tiene de especial este gesto? Dice mucho de quien lo esgrime y habla de alguien que superó las vanidades personales y el egocentrismo. También es señal de valoración por el otro. Solo las personas que se quieren a sí mismas son capaces de encontrar ese valor en los demás. La gratitud tiene que ver con una perspectiva de reconocimiento positivo hacia otros. Sentir que recibimos y darle valor, hace que nuestra vida sea más feliz”, dijo Sánchez.
6. Dar: podría resultar muy interesante vernos dando todo lo que podamos a los demás por una semana. “Solo tenemos que ubicarnos en la posición de detectar lo que los demás requieren o necesitan y, si es posible, contribuir a que lo consigan. Se pueden hacer regalos como abrazos, besos, palabras amables, reconocimiento, escucha o interés. Cada vez que sea posible, entregarle algo de nosotros a otra persona. Es posible que experimentemos sorpresas después de un par de días de hacerlo”, señaló.
7. Cambiar algo en la rutina: una forma de lograr que vibre nuestra vitalidad es cambiando algo en la rutina. "Ojalá que todos los días de esta semana de prueba logremos hacer alguna modificación. No nos propongamos cambios grandes ni permanentes, solo hacer de una manera diferente las cosas”, expresó Sánchez.

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