Tucson no tenía casa ni familia. Ahora, vive con el equipo de una concesionaria ubicada en Serra, Espírito Santo. Los empleados lo convirtieron en un suceso de las redes, al fotografiarlo en distintos lugares del local, simulando que está en plena jornada de trabajo.
Tucson es un perro callejero sin raza, mediano y de color mostaza. Un día de lluvia, los empleados lo encontraron en la vereda y lo entraron. Lo bañaron, le dieron comida, y lo dejaron dormir en la concesionaria. El buen comportamiento del animal conmovió al equipo que trabaja en el comercio, y decidieron dejarlo vivir allí de forma permanente.
"Es muy dócil y cariñoso. Cuando un cliente llega al concesionario, Tucson va a la puerta para darle la bienvenida. De hecho, algunos clientes compran el auto con nosotros gracias a él", contó el gerente del local, Emerson Mariano, en diálogo con el medio local Fohla Vitória.
En su bio de Instagram, Tucson figura como "Un perro sin raza con mucho orgullo. Expersona sin hogar. Asesor de ventas". Las simpáticas imágenes del perro -atendiendo el teléfono, detrás de un escritorio, o dentro de los autos- lo convirtieron en un suceso para la comunicación de la marca, ya que además de viralizarse sus fotos, fue el motor de varios artículos periodísticos en medios nacionales.
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