Un hecho insólito ocurrió en Vietnam. La policía confiscó aproximadamente 345.000 preservativos usados que habían sido limpiados y revendidos como nuevos en un almacén en la provincia sureña de Binh Duong.
Pham Thi Thanh Ngoc, un hombre de 33 años propietario del comercio, fue detenido y afirmó que recibía los condones una vez al mes por parte de un desconocido. Las autoridades mostraron su preocupación por las enfermedades e infecciones que podrían generar en los compradores.
Según detalló el detenido, los profilácticos usados se hervían primero en agua y luego se secaban y reformaban en un falo de madera antes de volver a empaquetarlos y revenderlos. Además, aseguró que recibía 0,17 dólares por cada kilo de preservativos reciclados.
En imágenes que difundió la Televisión Estatal de Vietnam (VTM) se podía observar una multitud de bolsas que contenían los anticonceptivos usados esparcidos por el suelo. Los mismos fueron confiscados como prueba y luego serán desechados de inmediato una vez que finalice la investigación.
“Los condones se clasifican como artículos médicos, por lo que analizaremos las diversas leyes que el propietario ha violado”, explicó un funcionario del gobierno. Los profilácticos eran suministrandos a hoteles y comercios minoristas.
La policía dijo que las bolsas pesaban más de 360 kilogramos (794 libras), equivalente a 345.000 condones, pero todavía no se sabe cuántos preservativos fueron vendidos.
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