Ulises tiene 14 años y desde los 4, vive una discapacidad, una secuela cuadripléjica que se produjo luego de haberse infectado de meningitis. Por esta razón, el joven pergaminense sufre la paralización de sus cuatro miembros y debe trasladarse en una silla de ruedas.
Hoy su familia se encuentra reclamando que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) y el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires, aprueben la vacuna para un amplio sector de discapacitados, quienes han quedado afuera del ya conocido “grupo de riesgo”, en el marco de la pandemia del coronavirus.
“Ulises tiene una discapacidad motora no cognitiva. Tiene paralizado los cuatro miembros de su cuerpo y está en sillas de ruedas desde hace 10 años. Ahora estamos intentando lograr que se haga visible esta necesidad de vacunarse contra el coronavirus”, le dijo a Infocielo, Sol Montrubianesi, la madre de Ulises.
Sucede que, según le informaron sus médicos, el joven de 14 años podría sufrir los embates de la enfermedad como cualquier adulto mayor. Es decir, pese a su corta edad, la discapacidad de Ulises lo volvió un paciente de riesgo.
“El sistema no lo permite todavía porque primero, Ulises no tiene edad y porque en el plan de vacunación no se tomó a este grupo etario sino al grupo de discapacidad en sí como factor de riesgo”, explicó Sol.
“Es una locura que la discapacidad no esté dentro de este grupo de personas de riesgos. Somos un montón de familias que estamos en esta misma situación, como los chicos electrodependientes”, exclamó la mujer, quien pidió ser recibida por la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti o el gobernador de la Provincia, Axel Kicillof.
Al respecto, la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) nacional y la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA) pidieron acatar la recomendación de la Defensoría del Pueblo que aseguró que este sector debe ser incorporado como grupo de riesgo para encabezar la lista de la vacunación contra el COVID-19. Por ahora, las autoridades no dieron dado alguna respuesta concreta.
“Ulises tenía previsto una operación para marzo del 2020, cuando estalló la pandemia. Pero se operó en noviembre porque la escoliosis había avanzado”, afirmó su madre, que explica que la enfermedad se le formó por estar 10 años sentado.
“Hace un mes tuvimos una consulta con el jefe de pediatría del Hospital Italiano. Le preguntamos si se podía vacunar porque está en el grupo de riesgo. Él nos recomendó que sí, pero al mismo tiempo un médico se la juega poniendo su firma si todavía la vacuna no está aprobada para este sector”, indicó Sol.
La situación es desesperante para muchas familias, que observan que la segunda ola de coronavirus golpea con más virulencia.
En tanto, el Foro Permanente Discapacidad acaba de presentar un proyecto de ley en el Congreso de la Nación -Nº de Expediente 464/21- para solicitar la incorporación de algunos casos de discapacidad para formar parte del grupo de prioritarios para la vacunación.
Si todavía no recibís las noticias de PRIMERA PLANA en tu celular, hacé click en el siguiente enlace https://bit.ly/3ndYMzJ y pasarás a formar parte de nuestra base de datos para estar informado con todo lo que pasa en la ciudad y la región.
