En la sesión que se terminó aprobando el Presupuesto Municipal 2024, facilitado por los bloques de Unión por la Patria y el Frente Renovador, no se contempla finalmente ninguna partida de fondos para la Sociedad de Bomberos Voluntarios.
Sí se aprobó un controvertido proyecto que le otorga una suma apenas superior a los 8 millones de pesos, que se dividirán entre enero, febrero y marzo próximos.
Además se decidió crear una Comisión de Seguimiento integrada por los ediles de los distintos bloques.
La cifra aprobada por el Concejo Deliberante anoche fue considerada como insuficiente por los Bomberos Voluntarios que asistieron al plenario, acompañados por integrantes de la comisión directiva y vecinos y vecinas en general.
Por ese motivo, los ediles de Unión por la Patria y el Frente Renovador fueron abucheados cuando ingresaron al recinto, en función que fueron a ellos a quienes Bomberos les solicitó apoyo ante la negativa de financiamiento del Ejecutivo Municipal.
En diálogo con PRIMERA PLANA, David Van Bacelaere, segundo jefe del Cuerpo Activo, se refirió a lo que significó la aprobación del proyecto de resolución que les otorga un subsidio hasta marzo. “Lamentablemente la sensación es de desazón y de tristeza, tal como lo venimos viviendo en las últimas sesiones que hemos presenciado, con el único objetivo de tener algún tipo de financiamiento.
“Lo único que se logró fue un subsidio que se va a entregar en los primeros 3 meses del año entrante que ya es un monto fijo. Tal como todos sabemos, estamos transitando los peores 3 meses de inflación y sabemos que lo que nos están ofreciendo no alcanza ni para cubrir la mitad de los gastos y estimamos que cuando entre el último subsidio, que va a ser en marzo, va a ser menos aún”, explicó.
Con respecto a la situación actual que está soportando la Sociedad de Bomberos Voluntarios reconoció que “es la misma que venimos transitando desde hace 4 años, que se inició el pedido de financiamiento de la institución y lo único que tenemos como respuesta son negativas o dilatar situaciones que nunca terminan dando contestaciones al problema central”.
Consultado sobre los posibles canales de diálogo con la nueva conformación del Concejo Deliberante, Van Bacelaere admitió que “por el momento no hemos tenido acercamiento. En la sesión se planteó que en la semana entrante se arranquen a coordinar las reuniones con la comisión de Presupuesto y Cuentas; Dios quiera que cumplan con el compromiso que están asumiendo hoy (por anoche)”
Sobre el financiamiento del Cuartel Central, explicó que solo reciben un subsidio anual a nivel nacional y otro provincial, pero que “son montos ínfimos para los gastos que hoy en día tenemos”. Asimismo expresó que “en cuanto a lo municipal son subsidios de carácter opcional del Gobierno de turno. Por otro, lado tenemos la cuota societaria y las rifas”
También habló del equipamiento. “Siempre hay cosas para mejorar. En los últimos 4 años, la última comisión trabajo mucho para levantar los estándares de seguridad del bombero, pero la realidad es que hoy en día no estamos en condiciones de reponer ni comprar absolutamente nada.
“El equipamiento se desgasta por la propia actividad y todos los materiales que usamos tienen vencimiento y cuando se empiecen a vencer las cosas lamentablemente no estamos en condiciones de reponerlas y eso conlleva una menor seguridad en el momento del servicio para nuestros bomberos”, sostuvo el segundo jefe del Cuerpo Activo.
Por otro lado, Van Bacelaere indicó que la suspensión de las guardias nocturnas “no es una medida que nosotros tomamos, sino que es algo que nos vimos obligados a hacer porque no hay dinero y la prioridad es el cumplimiento de los servicios que jamás se puso en duda, pero tuvimos que arrancar a recortar cosas que hoy impactan en el tiempo de respuesta de las emergencias”.
Los Bomberos Voluntarios aguardaron en el recinto hasta la finalización de la sesión, que se extendió hasta minutos antes de la medianoche.
Se marcharon del Palacio Municipal con un clima de profunda indignación y fuerte enojo, con gritos hacía varios concejales -principalmente Ignacio Maiztegui- que debieron interrumpir sus discursos de cierre.
No fue más que otra clara señal de hartazgo y seguir cargando con el peso de una lucha que parece no terminar: ayuda económica del Estado Municipal para prestar servicios de la forma que los pergaminenses necesitan.
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