El país habla de un hecho insólito ocurrido ayer, en la vecina localidad de Salto, dónde su intendente, Ricardo Alessandro, reconoció a dos “mecheras” que habían sido detenidas y liberadas hacía pocas horas y decidió echarlas a los gritos de la localidad que gobierna.
Previo a esa situación, cuyas imágenes recorren los medios nacionales, PRIMERA PLANA confirmó que estas mujeres tenían 6 denuncias en su contra y habían sido detenidas y posteriormente liberadas a las pocas horas. Y para lograr las aprehensiones actuó un experimentado comisario de la Delegación de Inteligencia Criminal de nuestra ciudad.
En el procedimiento, el funcionario policial, que conducía por motivos de servicios desde Rosario hacia Pergamino, fue alertado que un grupo de “mecheras” había robado en varios comercios de Salto y que el vehículo de los delincuentes estaba radicado en la ciudad santafesina.
Antes de llegar al acceso a la localidad de Mariano Benítez, el policía reconoció el vehículo marca Chevrolet, modelo Corsa, color blanco, cuya patente era coincidente con la descripción por la cual se había dado el alerta.
Así, decidió perseguirlos hasta el acceso a El Socorro, dónde los agentes del destacamento se encontraban realizando un operativo vial.
En ese momento, el comisario se hizo conocer con sus pares y les solicitó apoyo para poder identificar a los ocupantes del vehículo.
Se trataba de dos hombres, de 46 y 19 años y dos mujeres, de 23 y 20 años de edad.
En el interior del vehículo se encontraron elementos para remover los broches de seguridad de los comercios y una importante cantidad de prendas de vestir, una notebook y numerosos perfumes robados en 5 locales distintos de Salto, por lo que los 4 ocupantes del vehículo quedaron inmediatamente detenidos.
De acuerdo a información que pudo confirmar PRIMERA PLANA, los sujetos y las “mecheras” tienen vinculación directa con la banda criminal de Los Monos, liderada por miembros de la familia Cantero y que opera desde hace más de 20 años en Rosario.
Uno de los detenidos en el acceso a El Socorro estuvo preso hasta hace algunos meses por el delito de Portación de Arma de Guerra -tenía en su poder una pistola 9 milímetros- antes de cumplir 18 años y es sobrino de Claudio Ariel “Pájaro” Cantero y Ariel Máximo “Guille” Cantero, líderes de la organización criminal que domina el tráfico de drogas en Rosario, con métodos de una violencia tan extrema que transformó la ciudad en un escenario de feroces enfrentamientos y que -aún hoy- hace temblar su sistema político-judicial.
Los 4 detenidos poseen prontuarios en la Unidad Regional N° 2 de Policía de Rosario y en la Unidad Regional N° 17 de San Lorenzo, información ratificada por la Agencia de Investigación Criminal de Rosario.
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