Desde fines de marzo hasta principios de mayo un buen número de los integrantes del grupo Gastronomía Unida Pergamino (GUP) no pudieron funcionar con la normalidad habitual debido al contexto de la pandemia por COVID-19.
Las noticias no eran buenas en general y cuando no se podía esperar nada peor llegaron las facturas de luz y gas, cayendo como un mazazo sobre las esperanzas de los emprendedores.
Las voces se alzaron inmediatamente y tras una serie de explicaciones el terreno quedó abonado para que -diálogo mediante- puedan llegar las correcciones y soluciones.
“Ojalá salgamos lo menos lastimados posibles”, dijo María Rita Loreto, de Gastronomía Unida Pergamino (GUP) y propietaria de Isabella Café, el bar de la clásica esquina de Peatonal y Mitre.
Junto a otros representantes del rubro, se reunió con las autoridades de la Cooperativa Eléctrica Limitada de Pergamino (CELP), encabezados por su presidente, Roberto Zucarelli.
El objetivo fue claro, conocer de primera mano por qué los valores de las facturas no se condicen con el consumo que pudieron haber tenido mientras las puertas de los comercios estaban cerradas, explicaron a PRIMERA PLANA.
Borrón
La reunión fue fructífera y posibilitó a los integrantes de GUP a tener esperanzas sobre un posible acuerdo que no dañe tanto más, las ya complicadas arcas de sus comercios.
“La respuesta fue positiva porque quedaron en que nos iban a resolver el problema, se hicieron cargo de la situación”, manifestó Loreto, en torno a las diferencias planteadas y las cuales habrían surgido porque ante la pandemia no se tomaron los estados y en su lugar se facturó un monto vinculado al consumo del año anterior para el mismo período de tiempo.
Ahora, las autoridades de la CELP se comprometieron a revisar esas facturas y la próxima semana convocarán a un nuevo encuentro, en el que plantearán una solución concreta a las demandas. “Se hicieron cargo y eso está muy bueno porque son tiempos complicados para todos”, remarcó Rita Loreto, quien además destacó que fueron atendidos muy amablemente y con afán de colaboración.
Cuenta nueva
Además de la cuestión vinculada con la facturación, los empresarios gastronómicos también plantearon las complicaciones para pagarlas, cuando es de público conocimiento que al no estar trabajando normalmente, no cuentan con los recursos para hacerlo.
“Hablamos desde Gastronómía Unida, pero nos pasa a todos; cuando tenés trabajo no te importa, pagás y no decís nada, pero aún estirando el horario no se nota la mejoría. La gente está asustada o no tiene dinero y el consumo es muy poco para pagar semejante factura de luz”, dijo Rita Loreto, explicando su situación y acotando también que en otros casos directamente resolvieron no abrir las puertas porque trabajando al 50 por ciento no cierran los números.
Según lo explicado por la comerciante, la CELP realiza planes de pago pero al 2 por ciento de interés, sobre facturas que no representan la realidad.
Otra chance que ofrece la entidad de Avenida Marcelino Ugarte es pagar en 3 cuotas, sin ningún tipo de interés, pero el problema sigue siendo el monto de una factura que no había sido “medida”. También sobre esto tomarán una decisión más efectiva, según se prometió.
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