No solo el aumento de los hechos es altamente preocupante, sino también la agresividad de los carteristas o los robos silenciosos a personas que caminan en las calles se quedaron en la historia. En la actualidad el modus operandi de los asaltantes es más violento, de acuerdo con los registros de denuncian que se conocieron de un tiempo a esta parte. Los delincuentes ubican a su víctima, la siguen, la acorralan y amenazan con armas de fuego (en algunas veces las golpean) para que entregue sus pertenencias.