Un atípico hecho ocurrió en la madrugada del lunes, cuando alrededor de las 3:00 hs., a varios vecinos del Barrio Desiderio de la Fuente les tocaron timbre de manera prolongada e insistente.
Ante el susto, ninguno se asomó a ver de qué se trataba el timbrazo y se alertaron con avisos a través de WhatsApp: “Ojo porque nos tocaron el timbre 2 veces”, fue el mensaje que envió una de las vecinas a las 3:15 hs..
A la mañana de ayer, los frentistas de la calle Bolivia se encontraron con sus timbres, puertas, paredes y veredas con manchas y goteadas de sangre.
El miedo es el común denominador en el sector, donde hace menos de un mes mataron a un vecino en ocasión de robo: Héctor Santiago Santucho, un restaurador de bicicletas, de 50 años.
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“A varios vecinos de la calle les tocaron timbre desesperado. No sabemos si era un hombre o una mujer. Nadie salió a ver por miedo, obvio”, reconoció Patricia, una habitante de la zona que detalló lo ocurrido a PRIMERA PLANA.
Las manchas y gotas de sangre recorren calle Bolivia desde las avenidas Marcelino Ugarte hasta Hipólito Yrigoyen.
“Evidentemente lo estaban persiguiendo, porque no se quedaba esperando a que lo atiendan ni gritaba. Tocaba timbre desesperado y seguía”, señaló la mujer.
En la vivienda que se encuentra al lado de la Iglesia de la Virgen de Luján, la encargada de la limpieza manifestó que “era impresionante la cantidad de sangre que había” y que estuvo toda la mañana limpiando la vereda.
Por su parte, Paola, otra vecina del barrio, agregó que “mi pared y el timbre quedaron llenos de sangre. A mi vecina también le tocaron el timbre a las 3:30 hs.”.
La incertidumbre y el miedo se apoderaron de los vecinos, vecinas, al punto tal que nadie realizó la denuncia formal, ya que ninguno sabe con certeza que fue lo que pasó. Tampoco, por el momento, no se registró ninguna presentación en algunas dependencias policiales ni tampoco en el Hospital Interzonal General de Agudos “San José”.
“Yo supongo que esta persona habrá ido al hospital o a algún lado”, indicó Patricia, quien remató: “Seguramente, por la cantidad de sangre que había, debe estar muy mal herido. Capaz fue apuñalado o tuvo un golpe en la cabeza y se sostenía la sangre con la mano”. Nadie sabe que pasó en el Barrio Desiderio de la Fuente. Pero la sangre derramada y desconocer que sucedió genera misterio y mucha preocupación entre los vecinos y vecinas.
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